Y, ¿si solo necesito que me digas lo mucho que me añoras? Una sola palabra bastaría para volver a tu lado, tampoco es tan difícil. El único inconveniente es tu orgullo, tu estúpido orgullo que te ciega, no te deja ver las experiencias tan maravillosas que podríamos estar viviendo juntos, ahora, justo ahora. No es que no quiera decírtelo, me muero de ganas, la verdad pero, no es justo que siempre sea yo quien tenga que dar el brazo a torcer. Lo creas o no, cansa, el estar detrás de ti me agota y hace que esas fuerzas que me ayudan a llevar lo que tenemos, se quede en nada y, sinceramente, ya no puedo seguir luchando.
No hay comentarios:
Publicar un comentario